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Un romance arquitectónico entre el sur de Italia y Francia que encuentra su más vívida expresión en Texas.
Por KITTY SHEA
Así como existe la posibilidad de experimentar en la realidad el estilo de vida sureño, existe también la posibilidad de experimentarlo a través de la revista Southern Living. El calor sofocante del verano, los jardines espléndidos y las actividades al aire libre caracterizan a la primera, mientras que la segunda es un brindis con un julepe de menta en honor al estilo de vida de la región en la forma de 13 ediciones impresas y 1 de versiones reales al año. La Idea House 2011 de Southern Living se encuentra en la bahía de Horseshoe, Texas, ubicada sobre la ribera del lago Lyndon B. Johnson como si fuera nativa de la zona. Sin embargo, su acento toscano y sus azules mediterráneos sugieren una sofisticación que va más allá. La ubicacion de la casa dentro de la comunidad Escondido Golf, a unos 80 kilómetros de Austin, es igualmente escapista. La Idea House se construyó según instrucciones como segundo hogar y, al igual que las propiedades vecinas, su valor ronda entre los 2 y 3 millones de dólares. “Las Idea Houses son éxitos rotundos”, afirma Frank Craige, gerente del programa de viviendas de Southern Living en Birmingham, Alabama, y responsable de más de una docena de las construcciones anuales que realiza la revista. “Y en esta volcamos nuestras aspiraciones más elevadas”. El arquitecto Michael G. Imber, quien dirige la firma homónima ubicada en San Antonio, y su socio en decoración de interiores, Marcus Mohon, de Mohon-Imber Interiors, con oficinas en Austin, le imprimieron a la Idea House su sello clásico-moderno. “Queríamos incorporar influencias europeas, específicamente las que tienen algún significado en particular para el Sur y, en particular, para Texas”, dice Imber. Los bocetos en acuarela de Mohon, bosquejados apresuradamente en su habitación de hotel luego de reunirse con el consejo editorial de la revista), emanaban su inspiración autóctona. “Comenzamos a pensar en el color mucho antes gracias a los bocetos que ya tenía hechos en mi libreta de anotaciones”, recuerda Mohon. “Los tonos grises azulados me hacían recordar el lago”. El dúo eligió las tonalidades cuidadosamente con el fin de crear una atmósfera de descanso. “Queríamos una paleta de colores relajada, tranquila y sencilla, para que los tonos no compitieran entre sí ni generaran una estimulación excesiva”, expresa Mohon. “Es una casa de verano donde la gente va para escaparse del calor estacional”.
Destrucción constructiva
SALA DE ESTAR
Color: Buff (SW 7683)
El arquitecto Michael Imber diseñó un revestimiento de paneles de madera de 1,5 metros de alto con el fin de atenuar los cielorrasos a más de 5 metros de altura y brindarle un aire de mayor intimidad a las reuniones. La primera capa del recubrimiento (un quitamanchas básico para interiores) envejeció la madera y selló su veteado para que la pintura “flotara” sobre los paneles. Luego, la experta en pintura decorativa Nancy Coleman la envejeció aún más, cubriendo la superficie con múltiples capas de pintura y decapándolas para crear una apariencia rústica y desgastada. “El inicio del proceso es impactante. El constructor entró en pánico cuando vio lo que estaba haciendo Nancy. Creyó que estaba fuera de control, saboteando el proyecto”, cuenta Erin Schneider, líder del proyecto. (Coleman afirma: “No voy a decirles qué me dijo el constructor cuando comencé con el decapado”.) Aunque la detuvieron en varias oportunidades, Coleman prevaleció y creó un entorno de profundidad y textura que ameniza la paleta de neutros de la sala. David Mitchell, constructor de la empresa Casa Highland Construction, ubicada en la bahía de Horseshoe, quedó encantado con el resultado final.
Inundado de color
DESPENSA/
SALA DE ARREGLOS FLORALES
Color: Waterscape (SW 6470)
Un pivote arquitectónico aporta una nueva perspectiva al muro que separa la cocina de la despensa, creando un atractivo oleaje de un apacible color turquesa. “Los sureños están enamoradísimos de sus jardines, por lo que quería que esta habitación fuera más que una simple despensa; quería que fuera la portadora del romance propio de una sala donde se arman arreglos florales”, explica el arquitecto Michael Imber. Imber contrastó materiales rústicos (las vigas del cielorraso son maderas de granero recuperadas y los muros son tablones de madera en lugar de paneles de yeso) con la fresca sofisticación del azul para otorgar un efecto relajante. El máximo de los cumplidos proviene de Erin Schneider, líder del proyecto, quien confiesa que le encantaría sentarse en la despensa (¡la despensa!) a disfrutar una copa de vino.
“Más que una simple despensa, quería que fuera la portadora del romance propio de una sala donde se arman arreglos florales”.
Bajo el sol de Texas
MARCOS DE PUERTAS/VENTANAS EXTERIORES
Y PERSIANAS
Color: Night Owl (SW 7061 con colorantes al 50 %)
La tonalidad azul de los marcos y los postigos estilo campestre están inspirados en la Provenza, Francia. Encomendados a la tarea de enfriar los cálidos tonos de la dorada arenisca de la cantera local, fueron necesarios varios procesos de prueba y error hasta encontrar la tonalidad adecuada. Luego de pulverizar los postigos fuera de obra y colgarlos, “hicimos un alto en el trabajo y todos expresamos a la vez nuestra sorpresa”, recuerda Erin Schneider, líder del proyecto. El color original era hermoso, explica el diseñador de interiores Marcus Mohon, pero se veía desgastado por el brillante sol de Texas y el contraste con la piedra. “Casi ni era un color cuando lo introdujimos en el edificio”, dijo. Su cuidadosa elección aún lucía fresca, pero de un azul mucho más profundo y rico, que mantiene la sensación liviana y ligera de una casa de veraneo pero con la fuerza suficiente para ponerse a la altura de la piedra, a diferencia de los pálidos tonos pastel.
Olas de bienvenida
CASA DE HUÉSPEDES
Color: Rainwashed (SW 6211)
La casita de 74 metros² se asienta sobre el embarcadero, con el lago, musa inspiradora del diseñador de interiores Marcus Mohon, a sus pies. “Fuera de la despensa, es la habitación más colorida de la casa”, dice, a sabiendas de que su azul inspirado en el agua es un tono apenas un poco más verde que el de la despensa/sala de arreglos florales de la residencia principal. Nancy Coleman, la experta en pintura decorativa, disfrutó de trabajar con esas tonalidades. “Es un color bello y suave que podría funcionar con cualquier estilo decorativo, pero con suficiente personalidad
como para tener voz propia”, dice.